Almendras asadas con azúcar y especias.
Al caminar por el centro histórico de Tallin hay dos cosas que llaman la atención. La primera es la belleza de la arquitectura de la ciudad. Las casas y callejuelas abrazadas por una muralla construida desde la Época Medieval, parecen sacadas de un cuento de hadas. Una vez adentrados en la ciudad, a través del olfato, una segunda cosa atrae a muchos: las almendras especiadas que venden en muchos rincones de la ciudad.
En varias calles del centro de Tallin podemos encontrar pequeños puestos de aspecto medieval. Ahí, los vendedores, ataviados con trajes de la época, ofrecen probar este delicioso snack y sin mayor esfuerzo te convencen para comprar por 3 euros un cono de papel lleno de almendras especiadas.
Las almendras especiadas no es que sean una golosina con gran tradición en Estonia. No fue hasta principios del siglo XXI que los puestos de almendras especiadas comenzaron a aparecer por el centro de Tallin. El primero fue el del restaurante medieval Olde Hansa. Tuvo mucho éxito entre los locales y los turistas. Por ello, muchos puestitos similares fueron instalados. A pesar de no haber estado siempre ahí, los puestos de almendras especiadas forman ya parte de la experiencia general que se vive en el centro de Tallin.
Resulta imposible ser indiferente ante este atractivo turístico de la ciudad. Las almendras especiadas que venden resultan en verdad adictivas, mientras que la decoración de los puestos y las vestimentas de los vendedores, favorecen a crear la atmósfera para un cuento de hadas perfecto.
Tuve la suerte de estar en Tallin hace unos meses y tengo en el blog una entrada con una ruta gastronómica por la ciudad. Para esta receta de almendras especiadas me basé en la publicada en el blog estonio Nami-Nami. Y con esta receta participo en el reto Reposteras por Europa con destino Estonia.
ALMENDRAS ESPECIADAS

Ingredientes
- 1 taza de azúcar
- 1 cucharadita de canela en polvo
- 1/4 cucharadita de nuez moscada
- 1/3 cucharadita jengibre en polvo
- 1/4 cucharadita clavos en polvo
- 1 pizca de sal
- 1 clara de huevo
- 2 cucharadas de agua
- 300 g de almendras
Direcciones
- Precalentar el horno a 150º C.
- En un bol, mezclar las especias con el azúcar y la sal.
- Batir ligeramente la clara con el agua en otro bol.
- En un recipiente grande, verter las almendras y mezclarlas con las especias y la clara.
- Cubrir una bandeja con papel de horno. Esparcir las almendras por toda la superficie, cuidando de que se peguen lo menos posible unas con otras.
- Hornear las almendras de 30 a 40 minutos. Moverlas cada 5 o 10 minutos para evitar que se peguen.
Si quieren ver más postres de Estonia, les sugiero que visiten el recopilatorio para que vean lo que mis compañeras del reto prepararon. Los invito a que me sigan en mis redes sociales (Facebook / Instagram / Pinterest / Twitter) o que se suscriban al blog, para que les lleguen todas mis recetas directo al email. ¡Muchas gracias por leerme y hasta pronto!
Ay que bueno que encontraste la receta. Que lindos recuerdos. Mmmmmm
Jimena bellas fotos, un placer viajar a través de tus miradas. Sin duda estas almendras deben ser una completa adicción, empezando por el aroma que deben desprender O_O una delicia, tentadora e imposible negarse a estas almendras.
un abrazo!
La verdad que sí, Nati. El aroma te atrae, luego las pruebas y no puedes parar. Un abrazote.
Estuve en Tallín el año pasado y no ví las carretas con las almendras. Con la pinta que tienen seguro que hubiese comprado. Quizás las venden en invierno o coincidió que no vendía. ¡Cachis! Menos mal que has dejado la receta para poder disfrutarlas
¡Qué raro! Yo no he estado en verano pero varios amigos sí y todos han coincidido en que las almendras son adictivas. Pero quizás cuando vuelvas las ves o para más rápido, te animas a prepararlas en casa 😀
Un abrazo 🙂
Que ricas tienen que estar con las especias,un picoteo muy sano.
Las fotos preciosas.besinos
Muchas gracias 🙂 Y definitiamente, hay cosas para picar mucho menos sanas que las amendras 😉
perfecto este picoteo, especias y almendras… que bonito viaje, pasear por esas calles disfrutando de un cono de almendras tiene que ser mágico, encantada de pasar por aqui, besos
Sin duda las almendras acomañan perfecto en el paseo. Gracias por pasarte por aquí 🙂
Yo si las quitos los clavos de olor, las hago mañana mismo.
Qué ricas!!!!
Besotes
Son como las almendras garrapiñadas pero en más mejor!!! Uau que cosa más rica.
Sí. Son como almendras garapiñadas. Sencillas pero adictivas 😀