Bizcocho checo de nueces en forma de “montaña”. Receta de una abuela checa.
Después de varios meses fallando, hoy, día 15 de noviembre, por fin me presento a tiempo al reto Reposteras por Europa. El destino del mes es República Checa y, sinceramente, no tuve problema alguno en encontrar una receta para la ocasión. Bastó con tomar mi teléfono y escribir un mensaje en Whatsapp. Y listo. Al día siguiente tenía una receta muy checa en mi poder.
Mi amiga checa Zuzanita (que tiene un ratón chiquitín… mentira, ella odia esa canción), de quien ya les conté un poco en la receta del smažený sýr, me envió esta receta de su abuelita para preparar ořechová bábovka: un sencillo bizcocho de nueces checo. Se trata de uno de sus postres favoritos, por ser rico y sencillo. Además de traerle recuerdos felices de su niñez, cuando su bisabuelita se lo daba cuando la visitaba.
Según las palabras de Zuzana, este bizcocho checo tiene mucha presencia en las casas de las abuelas. Se prepara para ocasiones bastante sencillas como el café de domingo o para cuando tienes visitas y necesitas algo rápido y rico que ofrecerles. Es sencillo porque se puede preparar con ingredientes que casi siempre se tienen en casa. También, a los checos les gusta prepararlo para comer en viajes, ya que es fácil de transportar y no se rompe fácilmente.
La babovka se puede preparar, además de con nueces, con chocolate y vainilla, pasas o cualquier ingrediente que encuentres en casa apto para bizcochos. Este bizcocho es también típico en otras zonas del centro de Europa, tales como: Austria, Suiza, Alsacia y el sur de Alemania. La diferencia es que se conoce con otros nombres: Gugelhupf o kouglof.
¡Vamos ya encendiendo los hornos para preparar este rico postre checo!
BABOVKA DE NUECES

Ingredientes
- 120 g de mantequilla derretida
- 250 g de azúcar
- 3 huevos (claras y yemas separadas)
- 1 cucharadita de vainilla
- 250 ml de leche
- 200 g de harina
- 100 g de nueces molidas
- 1/2 cucharadita de polvo para hornear
Direcciones
- Precalentar el horno a 160º C.
- Batir las claras a punto de nieve. Reservar.
- Mezclar las yemas con el azúcar, agregar la mantequilla derretida y batir hasta formar una crema suave. Añadir la leche, la vainilla y las nueces. Mezclar bien.
- En un bol aparte, mezclar la harina con el polvo para hornear. Verter poco a poco la mezcla en el otro bol, mezclando para integrar los ingredientes.
- Finalmente, añadir las claras e integrarlas a la mezcla de manera envolvente.
- Engrasar un molde (preferentemente uno para Gugelhupf o Bundt Cake) y verter la mezcla en él.
- Hornear durante 45 minutos o hasta que al introducir un palillo salga limpio.
- Desmoldar, opcionalmente decorarlo con azúcar glass y disfrutar con un buen café (o té si no les gusta el café).
¡Por hoy es todo! Espero no fallar el próximo mes para este rico reto. Si quieren ver más postres checos, les sugiero que visiten el recopilatorio. Si no se las quieren perder, síganme en mis redes sociales (Facebook / Instagram / Pinterest / Twitter) o suscríbanse al blog. ¡Muchas gracias por leerme y hasta pronto!
Jimena
Facil y muy rico. ?
Me estáis tentando muchisimo con tanta babovka rica y deliciosa!!me la apunto sin dudarlo
besotes guapisima!
¡Qué rico¡ Tiene una pinta buenísima
Maravilloso. Es una suerte contar con amigos así, con abuelas así de generosas compartiendo su buen hacer…
Hemos coincidido en la receta,estaba muy rico.besinos
Hemos coincidido y hemos elegido la misma receta y es estos bizcochos para acompañarlo con una taza de café o té en el desayuno están riquísimos. El tuyo de nueces y con ese corte se adivina súper esponjoso.
Un besazo.
Jimena tu amigo te ha dado una receta tradicional y muy rica, me llevo un trozo y como lo dices para un viaje esta perfecta.
Besos
Ohhhhh qué delicia! Adoro los bizcochos sencillos, esponjosos, ricos, los de toda la vida, que al añadirle tal o cual ingrediente no pierde la esencia y éste lo tiene todo. (Qué suerte que Zuzana te haya prestado su receta familiar).
Un beso!
Vaya!! Receta de primera mano, jejeje. Se ve delicioso y además sencillito…no se le puede pedir más a un bizcocho.
Besos.